viernes, 30 de diciembre de 2011

Estoy muy bien

¡Estoy muy bien! ¡Estoy así de bien! Es genial estar así estos días, con el ánimo arriba, con ganas de vivir la vida, con ganas de comerte el mundo. Es genial estar así, pero yo no lo estoy.

Esta entrada es corta, no voy a hartarme de escribir ni voy a hacer una profunda reflexión al final o, al menos, no es eso lo que quiero. Solo quiero dar las gracias a esta sociedad, a esta gente que nos rodea, a todo lo que vivimos en general, por haberme hecho sentir, en el mejor intento de ser la mejor persona posible, como un despojo social, como alguien a quien nadie quiere, como esa persona apartada a la que todos miran mal y ni siquiera se compadecen de ella. Doy las gracias a Dios cada día por sentir lo que siento, por haberme hecho hasta que quiera vivir apartado de la sociedad porque siento que no soy lo suficientemente bueno para ellos. Y creerme cuando digo todo esto, pues os puedo asegurar que en este párrafo no hay ni un ápice de ironía.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Me gustaría...

Hoy me apetece escribir. Es uno de esos días en los que Coldplay suena cuando cierro los ojos y dejo volar mi imaginación cruzando todas las fronteras que se encuentre. Son días en los que quiero escribir, quiero plasmar todas las imágenes que se me vienen a la cabeza, quizá porque me aburro, quizá porque quiero que lo sepáis.

Estos días pienso en cómo me gustaría vivir. Me gustarían muchas cosas y muy grandes, como todo el mundo, pero no es eso realmente lo que quiero. Si me paro a pensar, quiero muchísimo menos, no quiero casi nada. Querría tener una casita pequeña, a ser posible con un jardín en la parte trasera, también pequeño. Que me pille cerca de un lago o un río, retirado. Un sitio donde, en noches como la de hoy, pueda sentarme a escuchar el agua fluir y poner en orden mis pensamientos, mirando al cielo estrellado.

Me gustaría tener un trabajo, no en una gran empresa, si no en esa típica, pequeña, donde todos los trabajadores se conocen y son como una familia. Me gustaría poder aprender más sobre mi fe, sobre los que me rodean. Me gustaría tener ese sitio especial en el relajarme y que, cuando este perdido, la gente sepa que ahí puede encontrarme. Me encantaría tener en mi vida a esa persona que, con mirarme a los ojos, adivinara qué pasa por mi mente.

Me gustaría tener muchas cosas en esta vida. Tengo miles de proyectos en la mente, tengo muchísimas cosas que me gustarían pero, por desgracia, pocas se cumplirán. De hecho, no espero que se cumpla ni una de las que están aquí escritas, pero quiero dejar clara una cosa: quiero dar las gracias a todas esas personas que han hecho que, con 20 años que tengo, me vea incapaz de conseguir todos esos sueños. De verdad, sin vosotros, mi vida habría sido mejor. Muchas gracias.

sábado, 24 de diciembre de 2011

Días

Hay días y días. Días en los que remontas el vuelo, ves las cosas desde otra perspectiva. Días en los que te levantas comiéndote al mundo, enérgico, con ganas de vivir. Y días en los que no quieres levantarte de la cama, porque sabrás que las cosas no pueden ir a peor.

¿Y si, en vez de un día, son semanas? ¿Y si no le ves el fondo a la botella? Me pasó lo mismo el año pasado, y conseguí mejorar en verano, pero ese buen tiempo pasó y nos situamos en Diciembre, al inicio de las peores fiestas existentes (en mi humilde opinión), y con todos los sueños rotos. ¿Que me fije unos objetivos a cumplir este año que entra? ¿Que cambie mis propósitos y coja la vida con más fuerza? Si, para que me pase lo mismo que las últimas veces.

A partir de hoy, seré un tío más egoísta, más pesimista, un tío peor, pero solo conmigo mismo. Tranquilos, que para los demás no cambiaré mi imagen. Y aunque la cambiara, se que a la mayoría no os importa.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Navidad

Llega la época del año que más me gusta. Navidad, que esta íntimamente ligada con regalos, estar con la familia, quererse...MENTIRA! Odio la Navidad, cada año que pasa me gusta menos y, conforme menos me gusta la Navidad, menos me gusta mi familia. Es así, algo que se supone que debería amar y querer, cada vez estoy dejándola más de lado y eliminándola más de mi vida.

De entrada: ¿por qué no me gusta la Navidad? Es muy sencillo. Como cristiano que soy, puedo decir con conocimiento que se ha "eliminado" el verdadero sentimiento de la Navidad. La gente solo quiere que llegue esta época para tener vacaciones, y para dar y recibir regalos como si no hubiera un mañana. ¿En serio? A todos nos gusta, pero por favor, celebremos el nacimiento de Jesús, no esperemos para celebrar el fin de año con una gran fiesta. ¡Por favor, vamos a tomarnos esto en serio! Y poniéndome ya un poco egoísta, es una fiesta CRISTIANA, lo que quiere decir que, si estamos en un estado LAICO, no todos deberían de celebrar estas fiestas y tener vacaciones, solo los que nos identificamos con esto. Así que por favor, un poco de respeto.

Y sigamos: ¿por qué odias a tu familia? Pues es bien sencillo. Vale que el ideal de familia que tengo no se identifique con el que pudiera obtener en la vida real, pero esto ya es pasarse. Unos no se hablan con otros, los otros se enfadan con los unos, todos peleados con todos y solo hay rencores, malas miradas, broncas. Llevo muchísimos años aguantando esto, y estoy cansado de ser la única persona que actúa como nexo entre todos. No pienso enfadarme con nadie, pero por supuesto que no quiero que esta sea mi familia, al menos no como la conozco ahora. Vale que sean mis padres, vale que sea mi abuela, mi tía, mi hermana, pero estoy harto de todos ellos.

Si la cosa sigue así, voy a hacer uso de la famosa frase que más usa todo el mundo, pero que yo jamás la he visto más acertada que nunca para esto: que el mundo se pare que yo me bajo.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Y ya van...

Muchas. Más de las que debieran. Y es irónico, porque si me dieran un euro por cada vez que oigo/leo un "No", sería rico, y me perseguirían y se pelearían por mi (o por mi riqueza, depende de como lo veas).

Paranoias aparte, ya no se qué más hacer. Y no por nada en especial, si no porque ya llegué a un punto en el que, pese a que esto debería ser devastador para mi (como siempre ha sido), simplemente no me importa, y no quiero que no me importe. Me estoy convirtiendo en un hombre sin sentimientos, que lo único que sabe hacer distinguir el bien del mal, e incluso en eso, a veces, se equivoca.

¿Dónde iré a parar? Por querer, ahora solo quiero que alguien me quiera, que alguien me haga tirar abajo mis esquemas y descubra, de nuevo, esas sensaciones, esos sentimientos, que a día de hoy tengo tan olvidados. ¿Es mucho pedir?

domingo, 4 de diciembre de 2011

Tengo ganas

Son la 1:36 de la mañana y hoy, de lo último que tengo ganas es de dormir. Tengo ganas de escribir, de darme a conocer, de predicar con mi vida. Tengo ganas de tenerte, de que tengas ganas. Quiero salir, enseñarte la ciudad, ir a esos sitios prohibidos cogido de tu mano. Hoy quiero hacer muchas cosas.

¿Los sueños, sueños son? No lo creo, siempre y cuando seamos realistas. "Quiero tocar las estrellas"; pues pon los pies en el suelo. Pero...¿y si las estrellas están más cerca de lo que realmente pensamos? Eso me hace pensar que, a día de hoy, estoy rodeado de estrellas, que hacen que mi día a día sea mejor nada más con pensar en ellas. Podríamos poner a la cabeza a mi madre, y acabar con mis perrillos que, cuando me ven cabizbajo, vienen a ver si me animo.

Lo cual hace que me plantee otra pregunta: si estoy rodeado de estrellas, inevitablemente debo girar alrededor de una. ¿Y cuál es esa estrella? En el plano teológico, la respuesta es totalmente firme e inamovible. En el plano personal, la cosa varía muchísimo. No se si estaréis de acuerdo conmigo, pero aquí no se puede aplicar el pensamiento heliocéntrico, sería algo como "bi-heliocéntrico", por darle una palabra. Son dos estrellas, que brillan con luz propia, y giran una alrededor de la otra de forma que, cuando una falta, la otra muere.

Esto se puede interpretar de mil maneras diferentes. Para algunas personas, ahora mismo, su "estrella" es ese tal Justin Bieber. Yo prefiero verlo como esa pareja de ancianos que llevan toda la vida juntos y que cuando, por desgracia, uno de ellos fallece, el otro solo quiere reunirse con él lo antes posible. Por eso esta decisión es tan difícil, no podemos equivocarnos. Sin embargo, este modelo viene con una batería de tests, lo que nos permite probar qué estrella es la que mejor encaja con nosotros. Lo cual nos lleva a otro problema: ¿es realmente necesario probar?

Aquí también tengo una respuesta sencilla: no, para nada es necesario. Es más, ni siquiera se recomienda. Hay otros métodos menos dolorosos para averiguar cuál es la estrella que mejor se acopla a ti. Lo que me lleva a la siguiente conclusión: creo que ya te he encontrado, pero no se si tu de verdad me buscabas a mi. Es más, ni siquiera se si buscabas o si esperabas encontrar, pero estoy aquí y tengo pocas ganas de irme, sino de empezar a dar vueltas como un loco. Acércate, hagamos cosas juntos: riamos, lloremos, saltemos. Divirtámonos como nunca y vivamos como siempre hemos querido. ¿Y porqué nos cuentas esto? Os lo dije, hoy tengo ganas de todo menos de dormir.

miércoles, 30 de noviembre de 2011

Navidad

Tarde gris de Noviembre en la que llevé a mi hermana a casa de su novio. Hablábamos de muchas cosas, de cómo es la vida de caprichosa, que nos da cosas y nos las quita sin que a nosotros nos de tiempo de nada. Y de esa multitud de cosa salió el tema de la Navidad. Es pronto para hablar de ello pero, si se esta poniendo ya el alumbrado de Navidad, ¿porque no puedo hablar yo de ello?

Ella afirmaba que la Navidad es un periodo para estar feliz, con la familia, disfrutando todos juntos de esos días en los que se celebra el nacimiento de Jesús, dejando atrás todos los problemas que pudiesen existir. No podía estar más de acuerdo con ella. Sin embargo, también me comentaba que ella quiere vivir eso desde ya, ya que ve que sus amigos lo hacen pero, por contra, nosotros no. Ahí me negaba rotundamente. Y es que ella sabe cómo es la vida aquí, sabe que no somos una familia normal, que no podemos hacer eso, pero sigue intentándolo.

Sin ella saberlo, la admiro por eso, por no perder nunca ese horizonte que es el disfrutar de la familia en lo cotidiano, que hará que pueda tener una vida plena el día de mañana. Pero siento desilusionarte, corazón: nuestra vida, en este momento, no esta hecha para vivirla como se debe, sino como se puede. Con esto no quiero quitarte la ilusión, solo quiero que pongas lo pies en la tierra y sepas que es lo que jamás debes hacer. Y el día de mañana estaré encantado de invitarte a mi mesa el día de Navidad y que compartamos esos momentos como familia que a día de hoy no podemos tener.

Señales

Últimamente estoy mucho más...místico, por decirlo de alguna manera. Veo señales de Dios donde seguramente sea todo mi imaginación. Si enciendo la radio y en todas las emisoras suena una canción de amor, pienso que estaré contigo toda la vida. Si llego a la facultad y me entero de que hay un 80% de probabilidad de que no me den la Erasmus, pienso que tengo tarea aquí que Dios quiere que cumpla.

Y es que me hacía mucha ilusión irme fuera un año, despejarme de todo, quedarme con lo que realmente importa y estudiar. Quería un año de "relax" dentro de lo que supone salir de Erasmus. Y resulta que, tanto que yo lo quería, todo será humo. Mi hermana hoy se reirá de mi por no irme, pero yo veré más allá. Veré que ella realmente no quiere estar un año sin su hermano. Veré que me quedan cosas que hacer aquí antes de irme fuera.

Y si últimamente tengo los sentidos más puestos en esas señales, es porque Tu quieres algo, y vas a hacer que se cumpla bastante pronto. Lo único que puedo hacer es pedir que sea algo bueno y, eso si, darte las gracias por lo que me traigas. No hará falta nada más.

sábado, 26 de noviembre de 2011

Crónicas de una ¿? anunciada.

Salí del bar algo intranquilo. Era raro: por un lado iba tranquilo, como seguro de mi mismo, y a la vez tenía la inseguridad del qué hacer. Pateé una naranja, sentí la necesidad de hacerlo para descargarme. Afronté el camino al coche con mil pensamientos distintos, ninguno convergía a nada en concreto. Llegué a su puerta deseando verla. Su manera de andar provocó en mi una sonrisa que llevaba días deseando sacar.

Lo que pasó aquí lo podríamos definir de mil maneras. La verdad es que, si alguien me pregunta, fue bastante bien. Aquello que tenía pensado se fue al traste, y acabamos andando sin un destino en mente, simplemente disfrutando de la noche. Me mostré inseguro, pero creo que lo superé con la charla. ¿Sabéis lo que es pasar un buen rato con la persona que te gusta? Pues simplemente eso fue lo que conseguí.

Pensando en un futuro no muy lejano, no me veo con ella. Y no es porque yo no quiera, porque realmente es lo que más deseo ahora mismo, si no porque se esta repitiendo la misma historia de siempre: acabaré siendo muy amigo de ella, y solo eso. No se exactamente qué es lo que hago mal en esto del amor, pero me prometí que con ella las cosas serían totalmente diferentes, que conseguiría algo, y no pararé hasta que vea cumplido mi objetivo. Prometo arrebatarte un beso algún día, prometo conseguirte la luna si tu me la pides. Lo único que yo pido a cambio es que me ayudes: que me ayudes a quererte.

martes, 22 de noviembre de 2011

Sentimiento (2ª Parte)

Hoy, 22/11/2011, estaba estudiando en la biblioteca. Más que estudiando, preparando la catequesis de este viernes. Extremoduro sonaba de fondo. En ese momento, sentí algo que he estado buscando tantísimo tiempo, por primera vez. No se si este sentimiento tiene un nombre, pero trataré de explicarlo.

Este fin de semana tuvimos una convivencia la Preco. Aunque no me hacía mucha gracia ir, porque tenía dos exámenes esta semana, no quería arrepentirme de no haber ido. Cogí mi coche y, sobre las 10:30, Pachi y yo nos encaminábamos hacia Loja, haciendo algo que siempre he querido hacer: hablar. Hablamos de muchas cosas, puede que de tonterías, pero hablamos. Me sentí genial.

Llegamos, y creo que viví uno de los fines de semana más intensos de mi vida. Sentí que tenía hermanos, sentí confianza, sentí que les importaba, me sentí querido entre ellos. Me cuesta explicarlo con más claridad, pero jamás olvidaré el sentimiento de la noche del sábado, cuando estábamos "jugando". Ahí realmente me sentí importante para ellos, en la misma medida que ellos lo son para mi. Me encantaría que todos mis hermanos hubieran vivido esa experiencia, y me encantaría que todo el mundo experimentara este sentimiento. Quizá así el mundo fuera un poco mejor.

martes, 15 de noviembre de 2011

Sentimiento

¿Sabéis qué es la empatía? Algo que, a veces se hace tan raro que exista, que ni siquiera el corrector ortográfico de Google Chrome lo tiene guardado en su diccionario. Para algunos (entre los que me incluyo), sentir empatía por alguien es algo bastante sencillo, solo es ponerte en su piel e intentar ver qué siente, cuál es su situación en ese momento e intentar ayudarle en lo posible, y es algo que me encanta hacer, porque me siento útil de esta manera. Pero hoy quiero ir un paso mas allá.

Partamos un poco desde la empatía, y pensad en esa persona especial para vosotros. Y ahora que estamos en la era de las tecnologías, pensad en cuando pone en su estado en Tuenti, o escribe en Twitter que el día le ha ido mal, o que las cosas no están saliendo como esperaba (cosa a la que me opongo pese a ser un "proceso de Informático", ya que pienso que las cosas deberían seguirse compartiendo de palabra, pero eso no nos atañe ahora). ¿Qué sentimiento os invade? ¿Es empatía? No sabría encuadrarlo en ninguno de los que se el nombre, pero creo que podría describirlo y, si tengo la suerte de que esto lo lee alguien, me gustaría que me dijera si coincide conmigo, o si me falta algo por poner.

Cuando yo veo que a esa persona especial le pasa algo malo, sea lo que sea, me invade un sentimiento de tristeza. Mis problemas quedan a un lado, y solo pienso en qué puedo hacer para que le sea más llevadero. Nada más pasa a importarme, solo ella. En ese momento, solo sería feliz si lograra arrancarle una sonrisa, si pudiera hacer que, por 5 minutos, no pensara en eso. Y si pudiera ayudarle, de cualquier manera, a solucionarlo, lo haría sin dudarlo ni un instante.

Pienso en esto muchas veces, y algunas me parece muy exagerado lo que digo, pero para nada lo es. Por esa persona haría lo que fuera. Pero si tengo claro una cosa: la mayoría de las veces haría el idiota, puesto que esa persona jamás haría algo así por mi. Y si lo harías, demuéstramelo.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Lo averigué

Al fin encontré la pregunta que tanto tiempo he estado buscando. Y si no es pregunta, aseguro que es algo que me hace cuestionarme bastantes cosas: ¿Por qué no he conseguido nada de lo que me he propuesto? ¿Por qué no puedo lograr nada?

El que lea esto, que lo piense. Igual a vosotros no os pasa, pero en mi es una pregunta que cada vez toma más fuerza, me señala con el dedo acusador y me enseña mis debilidades. Y es muy jodido encontrar respuesta a esa pregunta, es más jodido incluso, sin saber la respuesta, intentar cambiar las cosas. Para que nos vamos a engañar, es jodido hasta intentarlo, es muchísimo más fácil vivir intentando no echarle cuenta. Pero no puedo.

¿Pueden mis objetivos ser tan simples que los haya logrado sin darme cuenta? ¿Puede ser que no tenga la suficiente constancia para perseguirlos hasta lograrlos? A raíz de las dos primeras preguntas surgen mil más, cada una más hiriente que la anterior. Quiero solucionarlo y no se cómo. Lo daría ahora todo por una respuesta, pero esa respuesta tiene un valor que yo ahora mismo no puedo pagar. Y recemos porque pueda pagarlo más adelante.

viernes, 7 de octubre de 2011

Hoy

Hoy es de esos días que miras atrás y sabes que no has hecho nada importante en tu vida, miras adelante y sabes que no lo harás. Hoy es de esos días en los que te miras al espejo con asco, sabiendo que podías haber sido más y no quisiste. Hoy es de esos días que sientes la presión de todos, y nada en lo que apoyarte. Hoy es un día de mierda.

En días como hoy, que necesito a gente cerca, me entran ganas de estar malo, en un hospital, para saber quienes vendrían a verme. Parece macabro (de hecho lo es), pero me parece un método genial para hacer un "escrutinio" de amistades: aquellas que van a verte son de verdad tus amigos, y los que no, ¿para qué los quieres?

¿Y cómo están las cosas? Odio quien soy. Amo a la persona en la que quiero convertirme. ¿El camino? Cada vez lo dejo más de lado. ¿La culpa? De todos y de nadie. Solo mía. Sinceramente, no tengo ni la más remota idea. Solo se que cuando hay algo de luz en mi vida, aparecen grandes nubes que ensombrecen todo. ¿Cuando acabará? Esa es la pregunta que aspiro a resolver a lo largo de mi vida. ¿Y puedo ayudar de alguna manera? Si supieras las miles de maneras que hay para ayudarme...

martes, 4 de octubre de 2011

Desmotivación

Un día que parecía ir a mejor se trunca de repente. Una sola llamada hace que se venga todo abajo. En este mismo momento me siento la última mierda del mundo, y quizá lo sea. ¿Sabéis esas veces que desconectáis de la humanidad pensando "si me quieren, ya me echarán de menos y llamarán"? Pues las pocas veces que yo lo he hecho, podría haber muerto y nadie se hubiera enterado. Y yo creo que mi pregunta aquí es como aquella de Mourinho, ¿por qué?

¿Respuesta simple? Ojalá la supiera. ¿Compleja? Puedo llegar a darle mil vueltas al día y vuelvo siempre al principio. No se en qué parte del camino lo hice mal o me perdí, lo que si se es que está muy atrás como para retroceder a arreglarlo, y ha hecho lo suficiente como para no poder arreglarlo. Imagino que llegará el día en que todo esto serán meras tonterías de un chaval de 20 años, pero cada uno tiene su cosa, y más con estas edades, que es cuando hay que vivir.

Espero que me llegue el día en que la gente me quiera para algo más que para "quitar virus", en el que no me vean como un pagafantas, si no como alguien servicial. El día que eso llegue, será el día en que la gente se acuerde de mi, o quizá no. Me duele en el alma, echando vista atrás, que mis tíos, por poner el ejemplo más cercano, solo se interesen por mi cuando hay algún problema en el ordenador. Me duele que mis amigos solo me busquen para lo mismo. ¿Por qué sigo sacrificándome? Podría mandarlos a todos bien lejos y mi vida "QUIZÁ" fuera mejor, pero no es así como se hacen las cosas. Que la gente me llame tonto, pero seguiré dando lo máximo de mi para que, algún día, pueda recibir lo mínimo de alguno de vosotros.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Aprovechando

Hoy estoy especialmente pensativo, especialmente con la música del increíble Yiruma, por lo que quiero aprovechar para tratar otro tema que, casualmente, es TT en twitter. Quiero hablar acerca de las ilusiones.

Todos sabemos lo que es tener ilusión por algo. Muchos no habremos podido dormir la noche de Reyes esperando a que ellos llegaran y pusieran nuestros regalos. Todos hemos tenido esas mariposas en el estómago esperando a la chica que nos gusta. Y en estos dos ejemplos esta bastante claro que hay dos tipos de ilusiones, que voy a intentar explicar de la mejor manera posible.

Esta la ilusión que yo llamo "de niño chico". Es esa que tienes cuando te compran un juguete. Traducido al ámbito "adulto", es aquella que tienes cuando sales de viaje o cuando vas a empezar un trabajo nuevo, por ejemplo. Te preguntas qué pasará, cómo será, te preocupas de que te guste mucho y de disfrutar con eso, nada más. Suele aparecer y desaparecer constantemente. Desde mi punto de vista, sin esta ilusión no seríamos nadie.

Y esta la ilusión "enamoradiza", por decirlo de alguna manera. Esa que surge cuando te empieza a gustar una persona. Hay veces que la cosa se queda ahí, pero cuando se tiene contacto con esa persona, y parece que te responde, eso se convierte en un no parar. Empiezas a imaginar como sería la vida junto a ella, cómo os llevaríais...en tu mente se forman un sinfín de caminos, pero en todos vais cogidos de la mano. Y eso es la perdición de esta ilusión. Crees muchísimas cosas, algunas hasta las das por sentadas...pero te "defraudan". Resulta que, por diversos motivos, esa persona no quiere nada contigo, y tu mundo se viene abajo. Al contrario que la de niño chico, esta ilusión puede tirar por tierra casi toda una vida, hay que tener mucho cuidado.

Por suerte o por desgracia, yo he vivido solamente esas dos, por eso creo que son las únicas que existen. Mucho más dolorosa la segunda, sin lugar a dudas. Sería genial que eso cambiara. Hace poco experimenté esa "ruptura" que aparece de la segunda. Muchas ilusiones al principio, todo iba genial pero, simplemente, dejó de hablar conmigo. Y si yo le hablo ella me contesta, por supuesto, pero si no lo hago no pasa nada. Sentirte ignorado por la persona con la que imaginas todo porque ella te lo da a entender es algo muy jodido, pero me ha pasado, con esta, dos veces. Ya no se qué pensar ni qué hacer. Ojalá algún día las cosas cambien. Para todos.

Hoy...no

Hoy me levanté como un día cualquiera, con las mismas perspectivas de siempre, pero no era un día como otro cualquiera. El día de hoy esta marcado por muchas cosas pero, principalmente, marcada porque hoy ya no siento que todo vaya a ir mejor. Creía que empezando el curso, empezando mi primer año como APJ, yendo a reuniones, a Preco...creía que todo iba a ir mejor. Realmente lo creía.

Pero hoy podría decir que no es así. No van las cosas a mejor cuando te dan falsas esperanzas, cuando dan a entender cosas que se convierten en humo. No van mejor las cosas cuando tienes que estar otro año fastidiado estudiando algo que no te gusta y sin poder compartirlo con nadie, porque no te entienden. No van mejor las cosas cuando aquí, en mi propia casa, tengo al enemigo. ¿Qué puedo hacer para afrontar esto? ¿En quién me apoyo? ¿Cómo lo supero?

Se que no me falta gente que me apoya y que esta conmigo, no nos vayamos a engañar. Pero si es verdad que siento que no es suficiente, y en parte es por mi culpa. Nunca he querido contarle a nadie como me siento realmente, porque he tenido la "suerte" de que, cuando lo he hecho, se han reído de mi. Así que lo que la gente suele saber de mi son "medias verdades", de algo les suena el tema pero no saben de mis sentimientos.

Y seguirá así, por desgracia. Me encantaría contarle a una sola persona como me siento en lo más profundo de mi, todas mis incongruencias, todas mis preguntas...todas mis mierdas, por decirlo de alguna manera. Llorar sin venir a cuento y que me comprenda. Pero, lamentablemente, dudo que eso pueda llegar a suceder.

domingo, 11 de septiembre de 2011

Mi casa

¿Por qué tantas ganas de empezar el curso? Seguro que el que haya leído mi último tweet habrá podido pensar eso, y la respuesta es bien clara: por pasar tiempo fuera de mi casa. Quiero muchísimo a mi abuela, a mis padres y a mi hermana, que eso no lo dude nadie. Pero la situación que se vive con mi tía casi a diario en esta casa es surrealista.

Y que no se me malinterprete, también la quiero a pesar de su grandísimo defecto, pero es algo con lo que he estado viviendo los 20 años que llevo de vida, y es algo por lo que un niño no debe pasar. Antes no le daba importancia, pero ahora que he crecido veo como ella nos ha jodido la infancia a mi hermana y a mi. Tardes de no poder traer a los amigos a casa, y de no salir a la calle vaya que le contáramos a la gente lo que le pasaba.

Por eso quiero salir de Erasmus el año próximo, para ver como sería un año sin tener que preocuparme por ella o por mis padres, que se que todos aquí estarán bien, y preocuparme solo por mi. Me da muchísima pena dejar atrás mi Preco, a mis amigos, a mi familia, y sobre todo muchas cosas que seguramente dejaré a medias por miedo a acabarlas. Pero creo que un año que esté fuera me va a beneficiar muchísimo para saber qué es lo que debo hacer con mi vida, y estoy seguro que lo averiguaré.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Lluvia

Estos días empieza la lluvia. Me gustan los días lluviosos, me recuerdan lo que pudo ser. Estos días me gusta mirar al cielo y escuchar una canción de día lluvioso. Son costumbres, raras, pero que me ayudan a pensar con claridad.


Y, aunque eso ayuda, no siempre funciona. Llevo todo el verano pensando si irme el curso que viene de Erasmus. A simple vista, es una decisión fácil: ¿irte al extranjero, a unas "vacaciones pagadas", sin nadie que te vigile? ¿Dónde hay que firmar? Pero no es oro todo lo que reluce. Me encantaría poder decir "si" con los ojos cerrados, sin pensar nada más que en mi, pero es algo más complicado.

Tengo esa sensación de que todos los que me rodean me necesitan, pero no lo siento. Es como si, cuando me fuera de aquí, tan lejos, todo se va a desmoronar por mi ausencia. Y parece que soy muy egocéntrico, pero es todo lo contrario. No quiero ni que pase, ni tener esa sensación. Siempre me ha gustado que, el que me haya necesitado, aunque sea para lo más nimio, me lo haya dicho y, el que no, que me diera la patada. Y me gustaría que siguiera siendo así, solo que ya no es posible. Aunque lo que he dicho sea mentira, la sensación la sigo teniendo y, por desgracia, no tiene pinta de desaparecer.

Incluso iría más lejos. Desde que tengo uso de razón, nunca he querido involucrarme en algo emocional. Los problemas de los demás, para los demás y los míos, míos. Una buena amiga me hizo ver que así no era, pero poco consiguió cambiarme. Los míos, míos y los de los demás, veré que puedo hacer. Y ahora, queriendo cambiar por mi cuenta, cuando intento compartir los míos, la gente no me echa cuenta, se lo toma a broma. Quizá es un reflejo de este mundo: todos necesitamos ayuda, pero ninguno la ofrece. Yo me ofrezco.

miércoles, 31 de agosto de 2011

Cascos

Me acabo de dar cuenta de porqué es tan necesario para mi usar cascos. Hacen que no me entere de lo que pasa fuera, hacen que no me quiera enterar.

martes, 16 de agosto de 2011

De como veo ahora la vida

Hoy, en lo que hacía un descanso en mis horas de estudio, me ha invadido una sensación que hacía tiempo que no sentía, esa sensación que un día comenté que es esa en la que no eres capaz de dar un paso adelante, porque no tienes nada. Pero hoy, esta sensación era distinta, hoy era bastante...agradable. Lo he sentido por mi culpa, estoy así por mi culpa, y eso me da el poder, en cierta manera, para cambiarlo si yo quiero.

Que esté hoy así hoy es consecuencia de un verano que empezó de manera apoteósica pero que poco a poco se ha convertido en el cataclismo. He pasado de estar genial conmigo mismo y con los que me rodean en las colonias a ser bastante terco cuando he pasado un tiempo aquí. Y es exactamente ahí donde está el cambio, en Dios. Cuando estuve en las colonias, me invadió Dios. Era feliz allí, hacía todo con una voluntad increíble en mi, me sentía parte de una gran familia en la que todos nos queríamos pese a cualquier cosa. Llegué aquí y me encontré con que eso no era así y, pese a mis ganas y esfuerzos para intentar cambiarlo, desistí y dejé que este ambiente me consumiera para, poco a poco, llegar donde estoy ahora mismo.

Y quiero cambiarlo. Echo de menos a mi Preco, a mis hermanos que han pasado a Comunidad y a los que entrarán este año nuevos. Echo de menos a mi grupo de catequesis que, aunque este año puede que me toque uno nuevo, mi dedicación va a ser total. Echo de menos a mi acompañante, Benitez, que, aunque hayamos tenido poco tiempo, me conoce bien y sabe que es vital para mi. Echo de menos compartir con ellos, sentir lo que ellos sienten, darles mi apoyo tanto cuando lo necesiten como cuando no. Echo de menos todo eso.

Si tengo que quedarme con algo de este verano desde que estoy aquí, es mi charla con Alberto, mi hermano de Preco. Hace tiempo, sin que nadie dijera nada, me preguntó si estaba bien, y no lo estaba. Salió de él, y eso me alegró muchísimo el ver que alguien se preocupa por mi, y eso solo sale de uno si está en comunión con Dios, porque así esta también en comunión con el hermano. Estuvimos hablando hace poco sobre nuestras cosas, sobre como iba todo, y fue una charla en la que se con certeza que salimos reforzados tanto él como yo. Eso es lo que me alegra de ser cristiano, de creer en el Padre bueno, que nuestro amor hacia él se ve reflejado, sin que nos demos cuenta, en nuestro amor a los demás.

domingo, 14 de agosto de 2011

Solo esto.

Si la gente pensara solamente lo que somos capaces de hacer por ellos, la vida sería mucho más sencilla.

miércoles, 10 de agosto de 2011

Dicen

Dicen que cuando te encuentras mal, cuando no ves solución alguna, cuando ya no hay nada que hacer, lo único que te ayudará será el apoyo de un buen amigo. De ahí que digan que los mejores amigos son los mayores tesoros (parafraseando un pasodoble de "Los Condenaos"). Pero...¿y si no aparece nadie? ¿Y si esos "mejores amigos" no existen?

Soy una persona que tiene pocas amistades, pero muchos conocidos. Ahora mismo, podría asegurar que tengo 2 amistades verdaderas, digamos 3 por si me dejo a alguien, pero mil conocidos, mil personas de vista, mil "amigos de boquilla". Aunque tenga pocos, yo me pregunto a veces ¿de verdad serán tan amigos como dicen? Podría hacer la prueba sin ningún problema, y sería la siguiente: Hasta ahora, soy yo el que les llama, el que habla con ellos, el que mira a ver "como les va", pero puedo dejar de hacerlo. Puedo asegurar que pueden pasar, tranquilamente, dos semanas sin que tengan el más mínimo atisbo de preocupación por mi. ¿Eso es de verdad un amigo?

Tampoco quiero a esos amigos que están todo el día juntos, no los separa ni San Pedro. Solo quiero que esas personas estén a mi lado incluso cuando saben que ESTOY PASÁNDOLO MAL. Aunque imagino que, con la sociedad que tenemos hoy en día, debería entender yo a ellos, porque ellos no tienen problemas y pueden vivir su vida mucho mejor. Pero bueno, incluso si tienen problemas, llamamos al tonto de turno y que nos ayude a solucionarlos, total, ¿que más le dará?

Y aprovechando eso último, quería decir dos cosas: primero, y que se de por aludido quien quiera, si necesitas ayuda de mi, pídemela sinceramente, dime "solo quiero que me ayudes en esto y punto", no hagas que yo me interese más de lo que debo y, de repente, te "olvides" de mi. Y segundo, y más importante que todo esto (aunque se que él no me lee porque no nos hablamos) quiero felicitar a mi amigo Javi por entrar en el ejercito/academia (no se muy bien como va esto) del aire, después de mucho intentarlo. Me jode que te vayas, pero espero que lo pases allí de lujo y te sirva para cumplir tu sueño.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Fracaso...

...ese es mi apellido. Eso decía una serie que estoy viendo últimamente. La verdad es que tampoco se aleja mucho de la realidad. Dos meses detrás de poder hablar con ella, de poder verla, para que al final todo se vaya al traste por mis ganas. Este juego no lo dominaré nunca.

Siempre me han dicho que, para que una mujer se fije en ti, tienes que conseguir que ella sea la que tenga interés, es decir, en mi caso, ser de esa manera de la que no soy. La gente me dice que no, que no es así, que solo tengo que "cambiar un par de cosas". ¿Perdona? ¿Acaso "cambiar" no es dejar de ser como soy? ¿Para qué? ¿Para que otras personas se interesen por mi? No, gracias. Como decía Ché Guevara, "Prefiero morir de pie que vivir siempre arrodillado". Parece ser que cambiar es el futuro, pero me niego, no. Los pocos que me quieren, lo hacen siendo tal y como soy, ¿por qué habría de cambiar?

Vivimos en una sociedad en la que lo que importa es el materialismo en su forma más intensa, en la que importa mucho más lo que aparentemos que lo que pensemos. Así salen en televisión personas con un físico "envidiable" pero que no pueden situarte ni la capital de su propio país, y así nos va. Nos han metido eso por los ojos y, los que queremos ir "contra natura" somos los que más palos recibimos.

¿Y qué tiene que ver una cosa con la otra? Quizá esa persona en la que tu confías tiene algún propósito oscuro. Quizá esa persona a la que quieres tenga algo que ocultar por miedo a tu rechazo. Si esto tiene alguna repercusión sobre alguien, os insto a que dejéis atrás esos materialismos inútiles y que os centréis en el alma, que no habrá nada más bonito. ESO es lo que me gustaría que hubiera en el mundo, gente que mirara en el alma de los demás y así saber lo mejor de las personas. Si nos centráramos en eso, el mundo sería un lugar infinitamente mejor porque, cuando no lo hacemos, la gente sufre, y NADIE merece sufrir.

lunes, 25 de julio de 2011

En verdad no

A día de hoy, en los que el verano se ha convertido en algo bastante rutinario, me dedico mucho a examinarme, a ver como he cambiado o como han ido pasando las cosas y de qué manera me han afectado. Me sorprendió muchísimo lo que descubrí, pues por mucho que yo he querido cambiar, en verdad no.

Es jodido levantarte una mañana creyendo que el mundo puede cambiar, sentirte con ganas de darle la vuelta a todo lo que conoces, pero que no tengas fuerza para voltear aquello que quieres. Hoy me dio por repasar algunas de las entradas que he ido poniendo, con la esperanza de poderme reír de mi antiguo yo. Y mi antiguo yo me ha dicho "no te rías tanto, que todo lo que ves, permanece", y llevaba toda la razón.

Me ahogo en un vaso de agua. Necesito salir, despejarme...igual pillarme una gordísima y que al día siguiente no recuerde ni mi nombre. Darle al reset. Cambiar...en verdad no.

jueves, 14 de julio de 2011

De cómo veo la vida

Pienso que las cosas deberían ser más fáciles. Puede que haya gente que lea esto y piense que las cosas ya son suficientemente fáciles, y otros que piensen que no hay más dificultad que la que están pasando. Yo no estoy ni en un extremo ni en otro, aunque parezca lo contrario, pero es verdad que hay miles de cosas que deberían ser más fáciles.

Después de esta introducción en la que muchos de mis miles de lectores no habrán entendido nada, quiero explicar un poco como veo la vida. Es jodida, es correosa, es difícil, pero todos tenemos que pasar por ella. Nadie dijo que la vida fuera un camino de rosas por el que pasamos como Pedro por su casa, pero maldigo a aquellos que no me avisaron del camino pedregoso que hay que cruzar.

Es muy duro ver como se suceden los días y se desvanece aquello por lo que has ido luchando, aunque haya sido una pequeña lucha, un roce de nada. Y es normal venirse abajo cuando ves que, algo de lo que has estado ilusionado, es una farsa. Y más normal es no hacerlo, creyendo que podemos soportar todo lo que nos echen sin problema. Pero es todo una grandísima mentira, no somos capaces de soportar eso, es lo peor que nos puede pasar, y tenemos que darnos cuenta YA. Mientras antes nos demos cuenta de eso, antes sabremos que tenemos que apoyarnos en los demás para seguir adelante, antes lo haremos y antes nos sentiremos mejor.

Por eso es por lo que quiero compartir aquí, para que lo lean todos los que quieran, cómo veo la vida, y como la veo ahora mismo. Lo que empezaba siendo un verano que tenía toda la pinta de superar aquel mítico de 2º de Bachillerato, ha acabado convirtiéndose en otro del montón, otro en los que las perspectivas que tenía han superado la realidad como, todo hay que decirlo, siempre.

Mañana empiezo un periodo de 10 días en la playa en los que, a pesar de que la compañía va a ser muy agradable, todo se convertirá en pura rutina: de la casa a la playa y de la playa a la casa. Y lo peor de todo es que, a pesar de que me queje, no es un plan que me desagrade, al contrario. Me gusta porque es algo sencillo, fácil, en lo que sabemos qué va a pasar, en lo que todo esta atado y, si hay algún problema, sabremos como solucionarlo. Esa es la facilidad que quiero en mi vida y, cuando la tenga, que vengan todos los riesgos que quieran.

lunes, 11 de julio de 2011

Que pase lo que tenga que pasar

Hace tiempo que no escribía aquí, y era porque las cosas me empezaban a ir realmente bien. Cuando va todo sobre ruedas, es muy fácil abandonar un blog donde solo escribes tus penurias pero, cuando lo pienso y desde mi punto de vista, es lo que de verdad me hace falta para desahogarme un poquito.

Todo ha empezado hace un par de semanas. Era muy feliz, todo me sonreía. He pasado unos días que no tendré en mi vidas palabras para explicar lo buenos que eran, en TODO. Sin embargo, un suceso de hoy me ha dejado un poco trastocado. Después de tiempo sintiéndome bien, me han dado una noticia que no era la que yo esperaba, es más, ni siquiera se me habría pasado por la cabeza después de lo que ha pasado. Me ha venido tan inesperado que todavía ni lo he asimilado.

Pero una cosa si me ha quedado bien clara. Benitez, mi acompañante a la vez que una excelente persona, me dijo una frase que se me quedará marcada el resto de mi vida: "Si una persona te gusta, si tu de verdad sientes que hay algo serio que puede durar muchísimo, no pararás hasta conseguir estar con ella." Ese momento ha llegado. Que pase lo que tenga que pasar, pero tengo clarísimo que voy a luchar contra viento y marea solo por estar con ella, porque en vida nunca he estado tan seguro de algo como de esto.

viernes, 3 de junio de 2011

She's out of my league.

Ese es el título de la película que he visto hoy. La verdad es que parecía que mis amigos la habían escogido para mi, era como narrar mi vida. Sinceramente, pese a todo lo que pasa en la película, me veo más como la primera etapa del chaval, esa en la que se porta muy bien, pero no es recompensado y, cuando lo es, acaba cagándola. La diferencia es que, para mi, es algo que tengo asumido, y lo llevo lo mejor que puedo. O quizá no.

martes, 17 de mayo de 2011

Triste cumpleaños

Así es. Hoy, día de mi cumpleaños, es otro día en el que me siento más solo que la una. Nunca he esperado que todos se acordaran de mi día, ni que me hicieran la mejor fiesta de mi vida año tras año. Solo que los más allegados a mi me felicitaran con una sonrisa y, como mucho, recibir lo que yo he hecho.

Y es que ninguna de las dos cosas. Ni esos que creía tan cercanos, ni la gente a la que yo, en su momento, les preparé una sorpresa, me la han devuelto. Y poco más tengo que decir. A los que os habéis acordado, mil gracias, me hacéis muy feliz. A los que no, no os digo nada más que esperaba más de vosotros, por tantos años que hemos pasado juntos. Sin duda, esto confirma que, para mi, el peor día del año es mi cumpleaños.

sábado, 14 de mayo de 2011

Amigos

¿Dónde estáis? Vuelvo a verme solo. Lo siento, se que estáis ahí, pero es como si estuvierais vacíos, solo os veo el cascarón. ¿Dónde están esos amigos que se preocupaban por mi, que me llevaban por el buen camino? Ahora solo veo envoltorios de lo que antes era un buen caramelo. Esas personas que solo quieren el placer, el pasarlo bien, el tener son las que están ahora ahí. ¿Dónde quedó aquella amiga que me acompañó en el camino más duro de mi vida? Ahora esos desaparecieron, y dieron paso a otras personas que, a día de hoy, no conozco.

A veces pienso que debería haber nacido en otra época, una en la que no me sintiera solo. Hay algo que me gusta mucho hacer, y es soñar que tengo al lado una persona que me comprende. No le pongo ni sexo, ni cara, ni nada, simplemente es un alma que sabe lo que le digo, me escucha y me entiende, no hace nada más. Me gusta porque son los únicos momentos del día en los que no me encuentro tan solo en el universo.

La verdad, no se porqué, pero todo esto me lleva a preguntarme lo siguiente: ¿de quién es la culpa de esto? ¿Es de los que se han ido alejando, o mía? Y si es mía...¿por qué? ¿Qué he hecho para que se alejen de mi? Ahora necesitaría ese abrazo que antes pedía pero, como se que no llegará nunca, me conformaré con soñar que hay ahí alguien que me quiere, porque gracias a esos sueños sigo cuerdo.

Gestos

El amor. Es bueno, nadie lo niega. Llega siempre de la manera más inesperada, pero ¿por qué me ciego tanto en buscarlo? Seguro que esa ceguera es la que me hace no encontrarlo. Sinceramente, me cuesta ya encontrar el porqué quiero tener a esa persona especial a mi lado, pero poco a poco creo que voy encajando piezas, estoy llegando a entender eso de que es la persona que te completa.

Cuando pienso en todo el amor que me rodea, no recibo nada más que envidia. Pero no una mala envidia, de las que te pueden corroer y convertirte en una mala persona, si no una envidia sana, envidia de desear lo que la otra persona tiene y tu no, sin más. Soy un chico muy de ver series, sobre todo americanas, y en cada una de ellas puedo ver la virtud de las relaciones amorosas. Esa persona que te ama siempre está ahí para todo, ríe contigo, llora contigo. Y la verdad, te da un buen abrazo cuando lo necesitas. Hay veces que no necesitas tener sexo, ni siquiera un beso, solo el sentir que esa otra persona está ahí dandote un abrazo que te da la vida, te hace volver a tener esa esperanza que habías perdido.

También soy un tio sensible, sin egocentrismo. Lo digo porque jamás podré ocultar esto que digo. En la vida seré ese que va de duro, o de cruel para hacer que las mujeres se sientas seguras o algo de eso, paso. Soy sensible, y necesito una persona a mi lado que me comprenda y que saque lo mejor de mi, tanto mis mejores risas como mis peores llantos, y dentro de mi tengo, ahora mismo, ambas cosas. Lo que si ocultaré será mi estado de ánimo. Pocas veces me habrá visto nadie estar abatido, sin fuerza para respirar, como he estado. Jamás nadie me habrá visto sin ganas ninguna de vivir. Todos me han visto siempre con una sonrisa, pues, para mi, no es importante lo que me pasa, si no lo que le pasa al otro, y por eso trataré de ayudarle siempre sin importarme lo que me pase.

Algunos me criticarán esto por egoísta o vete tu a saber, yo soy feliz haciendo esto. Y el día que llegue esa mujer que me haga sentir bien, que me quiera y que sea mi alma gemela, ese día seré más feliz todavía. El día que esa mujer saque todo de mí y me abrace porque realmente me comprende y comparte mi pena y mi alegría, será el mejor día de mi vida. Y si ese día no llega o tarda en llegar, por favor, abrázame, porque así sabré que estás ahí para empujarme a ser mejor persona. Gracias.

jueves, 31 de marzo de 2011

Hace tiempo

Muchísimo tiempo que hacía que yo no entraba aquí a contar un poco como va la cosa. La verdad es que, si te paras a pensar, existen dos tipos de blogs: esos en los que la gente escribe lo mal que les va, o esos en los que se enseñan solo cosas graciosas. Al principio este era uno de los primeros, pero voy a intentar darle un poco la vuelta, y que combine lo mejor y lo peor de mi. Voy a intentar recapitular un poquito.

Lo peor de mi: me he tirado como 4 o 5 meses superagobiado, con los ánimos bajísimos, bastante mal en general. Pero lo peor de todo es que no sabía por qué era, por más vueltas que le daba. Y en vez de preocuparme en dejarlo estar, seguir siendo yo mismo y cambiarlo poco a poco, me cegué intentando salir de ese pozo en el que estaba. Llegué a un momento en el que ya ni siquiera sabía por qué hacía lo que hacía, porque iba a la universidad, por que salía con mis amigos, ni siquiera sabía por qué seguía haciéndolo. Fue fatal y encontré muy pocos puntos de apoyo que se que, a día de hoy, son los que puedo asegurar que me han hecho salir a flote: mi gran amiguísima (aunque la veo poco) Tere, Irene, que siempre tiene palabras muy bien elegidas para mi y, por supuesto, mi asistencia continua a la Preco. Gracias a vosotros, de verdad.

Punto de inflexión: Loja. Sin duda fue algo que me removió. Desde el primer encuentro en la capilla hasta el último, pasando por todos los testimonios que vivimos en Granada. Jamás olvidaré el bien que me hizo ir ese fin de semana "a ver que me decía" y, sin duda, me lo dijo casi todo.

Lo mejor de mi: Creo que lo mejor de mi no esta "en el mercado" todavía, pero si soy una persona totalmente diferente a día de hoy. Tengo las cosas un poco más claras, me dejo llevar mucho menos. Todos esos fantasmas que tenía antes desaparecieron, gracias a Dios encontré la causa de eso que me hizo estar mal, y estoy intentando llevarlo por el buen camino. Quizá no lo consiga, pero el hecho de intentarlo ya me hace ser mejor persona, me hace sentir perfecto conmigo mismo, y al final es lo que importa.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Estoy muy bien!

Pues si, la verdad es que últimamente estoy bastante bien. Centrado en mi, en mis cosas, y pasando un poco de los demás, que me hacía falta. Y es verdad que muchísima gente deja de escribir en su blog cuando esta bien, y parece que todo es negrísimo, por eso solo quiero escribir esta entrada para decir eso, que estoy muy bien.

lunes, 14 de febrero de 2011

Tonterías varias

Porque si, son muchas tonterías, pero todo tiene la importancia que le queramos dar. Hace poco (en realidad, menos de lo que esperaba), escribí esta entrada en la que venía a decir que no tengo nada por lo que seguir adelante. Creía que con el tiempo se me pasaría eso y que volvería a verlo todo bastante más claro, pero en realidad es todo lo contrario, sigo cayendo en este pozo en el que no encuentro la cuerda para poder subir.

Ahora mismo, mi vida es bastante monótona y aburrida, que se resume en estas acciones: levantarme, ir a la universidad, comer, estudiar, utilizar el ordenador, cenar y dormir. Y es algo que llevo repitiendo todo lo que llevamos de año y, por lo menos, la mitad del anterior. No varía nada ningún día, sea lectivo o festivo, entre semana o al final de ello. Son procesos mecánicos a los que ya ni siquiera echo cuenta, como si fuera una máquina. A veces ni siquiera me paro a ver cuál es la comida que toca o qué asignatura estoy estudiando, y la situación que me rodea, la verdad, no es la más adecuada para actuar y cambiar, ni siquiera para poder quejarse, por eso me ayuda este blog.

Peleas por donde vaya. Nunca me he visto en una situación en la que las personas que realmente me apoyan pueda contarlas con los dedos de una mano, y puede que hasta me sobren. Creerme cuando digo que es bastante duro que no puedas apoyarte ni siquiera en tus padres, porque sientes que su cariño hacia ti se va desvaneciendo. Y cuando buscas ese apoyo fuera, resulta que todos te rehuyen sin motivo aparente. Todos los que parecía que siempre iban a estar ahí andan escondidos, rezando por que tu mirada no se fije en esos falsos amigos que un día te dijeron "para lo que necesites, sea lo que sea, no dudes en decírmelo".

Contaré algo a modo de anécdota por si alguno de mis millones de lectores no ha entendido esto bien. La semana pasada, con todos los exámenes ya terminados, busqué a algún amigo, de los más cercanos para ir al cine y así poder contarle lo que me pasa y que, por lo menos, me escuchara. Cual es mi sorpresa al ver que todos niegan salir conmigo, alegando problemas varios por los que no podían salir. Sin desconfiar de ellos, voy a preguntarle a otros, a ver si por lo menos consigo ir en esa semana al cine, cuando me confirman que TODOS van a una fiesta, incluidos aquellos que "siempre están ahí", no querían ir al cine conmigo, no querían salir conmigo, y ni siquiera quieren verme, porque no fui invitado a esa gran fiesta.

Y resulta que esos amigos son los que solo se preocupan si ven un mal estado en tu Tuenti, o no les has ayudado en su granja. Desde luego, lo leí una vez y ahora me lo creo cuando dicen eso de "eres más falso que un amigo en Facebook".

viernes, 11 de febrero de 2011

Sentir

Esta noche acerqué a mi amiga Cristina a su casa, porque era bastante tarde y ya no tendría autobuses que coger. Parece algo muy simple, algo que podría hacer cualquier otro día, pero la verdad es que siempre que me lo pida lo haré encantado y cada vez será especial. La razón es muy sencilla: la puedo ayudar acercándola, y si puedo ayudar en cualquier cosa, lo haré y me sentiré vivo.

La verdad es que, si hay algo que me guste hacer por encima de todas las cosas, es ayudar a alguien. Ya sea conocido o no, sin duda es algo que amo. Que alguien te diga que le dediques un ratito y estés con él, escuches sus problemas o que hagas de taxista. Me encanta sentirme útil con la gente, me hacen ver que sigo aquí, que no se olvidan de mi y, por supuesto, jamás me olvidaré de aquellos que me llevan en sus mentes.

Porque creo que un gesto vale más que mil palabras, quiero decirte a todo el que pueda leer esto que, si necesita algo, lo que sea, no dude en pedírmelo. Estaré ahí para lo que haga falta, solo te pido una cosa: a cambio tu debes ser sincero, ve con la verdad por delante. No quieras utilizarme porque, aunque parezca mentira, solo te engañarás a ti mismo.

jueves, 10 de febrero de 2011

San Valentín

En estos días previos al día de los enamorados, es inevitable que muchos sentimientos afloren. Los enamorados van buscando un buen detalle para su amor desesperados, como si fuera lo más importante del mundo, y quieren que su regalo sea el mejor. Otros buscan una reserva en el restaurante más caro de la ciudad para impresionar a esa persona que tanto quiere. Las personas que estén como yo, sin plan alguno, seremos embargados por una soledad bastante extraña.

Esa soledad no es la de sentir que nos falte al lado a un buen amigo, o la que sientes cuando estas en medio de un grupo de desconocidos, por decir algunos ejemplos. Es la soledad de no tener a esa persona especial a nuestro lado. Ese día, por triste/desesperado que parezca, solo nos limitaremos a lamentarnos de las oportunidades perdidas, a pensar en lo que pudo haber sido y a rezar para que esa persona que nos gusta no haya salido tampoco con nadie, porque así podríamos hacer algo. Veremos a esos novios dando paseos cogidos de la mano y sentiremos una envidia tremenda y, si nos diera alguien un beso, para nosotros significaría todo lo que quisiéramos.

De hecho, recuerdo ese mismo día pero del año pasado. Recuerdo que mandé un mensaje a tres amigas mías muy especiales, y pasó lo siguiente: la primera dejó de hablarme, con la segunda hice una amistad preciosa, y con la tercera surgieron unos sentimientos bastante fuertes que, pese a compartirlos, se desvanecieron en poco tiempo. Este San Valentin será para mi como los anteriores, sin plan y sin nada que hacer. Me dedicaré a imaginar como sería mi vida con ese alguien a mi lado, nuestra vida. Por desgracia, es todo lo que podré hacer.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Un instante

Solo un instante me valdría para decirte lo mucho que me gustas, pero me llevaría toda una vida demostrártelo. Me encantaría tener nada más que ese instante para que lo supieras y, si tu quisieras, que compartieras conmigo la vida para que te lo demostrara día a día. Te diría que estoy loco por ti desde el primer momento que te vi y que estoy haciendo lo imposible para que te des cuenta, que me encantaría saber a qué saben tus besos, lo suaves que tienes tus manos y lo cálido que son tus abrazos. Pero todo se quedará en un ojalá...

lunes, 7 de febrero de 2011

No todo es malo

A pesar de estos días oscuros, me gusta ver, de vez en cuando, lo bueno que hay en la gente, lo bueno de lo que me rodea, porque pensar siempre en negativo no lleva a ningún lado. Y es que, aunque me cueste verlo, gracias a Dios estoy rodeado de personas con un corazón gigante, y que están ahí incondicionalmente.

Porque me gusta ver como esa gente se acuerda de mi con el más mínimo gesto, con la mínima palabra, con la mínima sonrisa, y no piden nada a cambio. Dios sabe que esas personas serán las que llevaré hasta el fin del mundo si es necesario para devolverles esto que me están dando, porque alivian mi carga.

Pero no todo lo bueno viene solo de personas que conozco, también de desconocidos. Hace poco salí por ahí con unos amigos, y estaba un poco triste. En lo que estábamos charlando en un bar, me quedé un rato callado y estaba a mi bola, cuando una niña chiquitita que estaba por allí se me acercó, me tiró de la manga para que la viera, me sonrió, y se fue. No hizo nada más, pero ese gesto me valió muchísimo más que cualquier palabra de apoyo que hubiera soltado nadie en ese momento.

La verdad es que doy gracias por estos gestos que hacen que uno empiece a ver la vida de un color esperanza que parecía desaparecido en mi gama cromática. ¡Gracias!

martes, 1 de febrero de 2011

No te confíes

No estaba pasando por un momento especialmente bueno, pero cuando empezaba a levantar la cabeza, a verlo todo más claro...vienen y me hunden cada vez más.

Y lo peor de esto no es lo que me pasa, ni que mis ánimos estén por los suelos. Lo verdaderamente peor es no tener nadie a quien poder confiarle mis pesadillas sin que emita una burla.

viernes, 28 de enero de 2011

No lo entiendo

Desde que me acuerdo, siempre me preguntan porqué mi única relación duró tan poco, y la solución es bastante sencilla. Si te gusta alguien, tienes que intentar no esconderlo, tienes que ir y decirlo, y que pase lo que tenga que pasar. Sin embargo, parece que eso ha cambiado, ahora se trata todo de un juego al que, por suerte o por desgracia, no se jugar.

¿Por qué tenemos que hacerlo? ¿Por qué tenemos que usar esas máscaras? De verdad que no lo entiendo y, si alguien lo entiende, que me lo explique. Llevo meses detrás de una mujer, pero no puedo decirle nada, y la verdad es que no me gusta eso. Pero ahora, con este juego, se trata de que esa persona sepa que te gusta y que vas a estar siempre pendiente de ella, y así esa persona pues ya empieza a sentir algo por ti, o algo así. Sin duda, eso hace que nos mostremos de una manera totalmente contraria a como realmente somos.

Pero yo se por qué no le he dicho todavía nada. Porque, por mucho que me guste, tengo miedo de perderla, me ha costado demasiado que sea mi amiga como para que, después de decírselo, deje de tener cualquier trato conmigo. Si pudiera, le diría que me gusta muchísimo, que cuando no la veo solo pienso en ella, y cuando la veo me quedo sin palabras solo admirándola. Pero claro, se me tomaría como un loco...

viernes, 21 de enero de 2011

Lo inesperado

Hoy me ha pasado algo que jamás pensé que me pasaría. Volvía de la universidad andando y, de repente, me paré, no podía seguir andando. Hasta aquí, parecería que estoy loco, pero el verdadero motivo no reside en algo tan simple. Me di cuenta de que no tenía ningún motivo para seguir adelante. Y me paré a pensarlo, a intentar poner mis ideas en orden.

Pero no saqué nada en claro. Por más que intento pensar qué es lo que me hace que no tenga nada por lo que luchar, siempre llego a un callejón sin salida. Solo llegué a por qué no tengo nada ahora mismo, y es por algo bastante simple: todo por lo que peleé o aquello que quería se desvaneció. Vivo en una constante competición con todos, incluso con aquellos que creía mis amigos, y estoy realmente harto de esto.

Quiero tranquilizarme, sentarme a pensar qué es lo que pasa a mi alrededor. Quiero vivir la vida ahora, que no se me haga demasiado tarde. Quiero enamorarme, y que la persona de la que este enamorado me corresponda. Quiero tener amigos de verdad, y no esos de conveniencia. Quiero un cambio que, por desgracia, no esta a mi alcance.

lunes, 17 de enero de 2011

Los grandes permanecen

Hoy quiero dejar atrás lo que me pasa, tanto yo, yo y más yo y pensar un poco más en las personas que me han guiado a ser como soy. Quiero recordar hoy a una persona en concreto. Hace tiempo que nos dejó, pero todavía no he sido capaz de ir a visitarle, o siquiera de pensar en él y en lo importante que fue para mi. Incluso escribiendo esto pienso que no estoy preparado, pero se lo merece.

Y eres tu, Seba, esa persona a la que quiero llegar a parecerme algún día. Incluso en los momentos más adversos tenías esa fuerza para poder separar lo que sentías de cómo tenías que estar para los demás. Recuerdo que, a pesar de esos piques con mi padre, todo lo solucionabas con una risa, o con hablar con el que lo necesitaba hasta las tantas.

Y aunque ahora mis recuerdos de él pueden que sean vagos debido al tiempo, hay algo que nunca olvidare de nuestro "Seba grande". Antes de que nos dejara, se pasó varios días pegado a mi, viendo todo lo que hacía, y apoyándome en el gesto más insignificante que tenía. Me mortificará siempre que se fuera sin poder darle un beso y un abrazo, y recordaré el momento en el que lo supe siempre con lagrimas en los ojos, tirado en la cama y pensando solamente en el que la mejor persona que he conocido nunca ya no me saludaría nunca más al llegar a casa.

Así se fue, pero no nos dejó para siempre. Todavía en cualquier cosa que hago, puedo sentirlo, puedo ver que esta conmigo, y a Dios le pido que le deje conmigo para siempre y se que lo hará, porque los grandes, siempre, permanecen.

miércoles, 12 de enero de 2011

Amistad

Los valores de hoy no son como los de antes. He sido criado en un entorno en los que tener un buen amigo era muchísimo mejor que cualquier otra cosa en el mundo, y no como ahora, que tener un amigo implica tener alguien a quien mangonear.

¿Por qué tantísima hipocresía en una amistad? Falsas promesas, mentiras...¿Qué es para la gente tener un amigo? De verdad, quiero saberlo. Porque no comprendo como puedes joder tanto a alguien que demuestra que esta a tu vera pase lo que pase. Y no se por los demás, pero el que escribe esto no es tan tonto como demuestra, y sabe perfectamente quien oculta cada cosa. Estoy demasiado escarmentado, otra más intentaré que no me la den.

martes, 11 de enero de 2011

¿Hay alguien ahí?

Hoy he querido hacer estas tres entradas para resumir un poco lo que he sentido estos días, aunque esta aclaración es más bien nula, porque podría decir sin riesgo a equivocarme que el único lector de mi blog soy yo.


"A veces es fácil sentir que eres
el único del mundo que está luchando,
que está frustrado, o insatisfecho,
o quedándose atrás.


Pero ese sentimiento es mentira.
Y si aguantas, si encuentras el coraje para
enfrentarte a todo otro día más
Algo o alguien te encontrará
y hará que las cosas mejoren.

Porque todos necesitamos
un poco de ayuda a veces.
Alguien que nos ayude
a escuchar la música del mundo.
Para recordarnos
que no siempre será así.

Que alguien está ahí fuera.
Y que ese alguien te encontrará"

Como en una película

¿Quién no ha dicho alguna vez "ojalá mi vida fuera como esta película"? Es algo que todos hemos deseado, y se resume en pasar un mal momento, pero al final y contra todo pronóstico, acabamos con la persona que amamos y vivimos felices para siempre. Y la gente cree que no viviremos eso jamás. Pese a como estoy estos días, que parece que ando menopáusico, puedo decir sin miedo a equivocarme que todos vivimos una película muy parecida, solo que escrita con distintos guiones.

¿Quién no ha tenido alguna vez un triunfo? Ya sea grande o pequeño para los ojos de cualquiera, para nosotros puede que tenga ese aire especial que no conseguiría ninguna otra cosa en ese momento.

¿Quién no ha tenido un fuerte contratiempo? Al igual que lo de antes, todo es de la importancia que nosotros le demos pero, si paramos a pensarlo, siempre hemos tenido esos momentos de debilidad en los que no veíamos a nadie alrededor, y creíamos que el mundo se nos venía encima. Eso pasa, y todos lo sabemos, pero es tanta las ganas que tenemos en ese momento de desaparecer que no vemos más allá.

¿Quién no ha sufrido un desamor? Un desengaño de este tipo marca mucho, más de lo que podamos imaginar en el mismo momento, por mucho hierro que queramos quitarle. Y todos nos hemos imaginado que estábamos caminando debajo de esa lluvia finita, que hace que el día esta gris, con una triste canción de fondo y pensando en todos aquellos momentos que podrían haber sido mejores si esa persona especial estuviera a nuestro lado.

¿Quién no ha terminado enamorado? Al final, todo acaba bien, nos enamoramos de una persona que nos corresponde, que quiere un futuro con nosotros, y la vida se vuelve de color de rosa. Es el momento que más tarda en llegar y es el que más se disfruta sin ninguna duda.

Todos vivimos en una continua película, solo tenemos que saber cuál es nuestro guión.

Hay quien no cree

Hay quien no cree en la existencia de Dios. Es más, hay gente que ni siquiera cree que exista algo superior a nosotros que nos maneje o nos guíe, llámese "karma" o cualquier otra cosa. Es algo que nunca comprendí pero que si respeté. Pero Dios me ha demostrado hoy que existe, como otras veces.

Miles de veces le pedimos a esa divinidad que nos ayude, que nos mande una señal para saber si vamos por buen camino, y después nos cabreamos porque no la hemos visto aparecer. Puede que la señal nunca sea tan evidente, pero esta SIEMPRE ahí si la pides, solo tienes que estar atento. Y a mi siempre me ha ayudado, pese a no ser tan "capillita" ni rezarle todos los días, como nos enseñan desde chicos.

Le pedí que me guiara acerca de lo que estoy viviendo últimamente, llevo una muy mala racha y quería saber si iba a cambiar a mejor y, por cruel que parezca esto, Dios me ha demostrado que no, no cambiará, y es algo que le agradezco infinitamente. No por el hecho de que no cambie, si no porque me ha demostrado que siempre esta ahí para lo que haga falta, aunque todo esté en contra, siempre estará Él.

Con esto no quiero decir que la gente tenga que creer para que la vida vaya mejor, ni mucho menos, pero desde lo que estoy viviendo, si puedo decir y pido que la gente no pierda la esperanza por mucho que cueste, porque al final vendrán mejores tiempos, por mucho que tarden en llegar.

domingo, 9 de enero de 2011

¿Qué se siente?

Todos nos hemos preguntado eso alguna vez, pero ¿cuál es el mejor sentimiento? ¿cuál es el más feo? Posiblemente ahí entremos en la opinión de cada uno, y es que hay millones de sentimientos, cada uno adecuado a cómo nos sentimos, a qué vivimos, a nuestro estado de ánimo...

El odio, un sentimiento que la gran mayoría ha sentido una vez. Un sentimiento que solo despierta en ti rencor, mala gana, y, porque no decirlo, si te ponen por delante a la persona que odias que te agarren, porque de otra manera te lo cargas. Para mi es un sentimiento feo, que deberíamos de intentar eliminar, pero hay muchísima gente que se empeña en que exista y, no conforme con eso, quieren que crezca.

La indiferencia, que es sin duda el peor "sentimiento" existente. Tienes que importar bastante poco a alguien como para que no sienta para ti nada. Tan poco, que puede que ni siquiera sepa que existas, que se preocupe 0 de todo lo que te pasa a ti o a tu alrededor. Es lo único que puedo decir que odio, en todo el significado de la palabra.

La empatía, un sentimiento que, para la mayoría de las personas que conozco, es totalmente inexistente. Por si alguien de los miles de lectores que me siguen no sabe lo que es, la empatía es la capacidad de ponerte en el lugar del otro, para poder comprender mejor qué es lo que le pasa. Si todo el mundo, todos, tuvieran nada más que un poco de empatía, sin duda nos iría muchísimo mejor que ahora, sin ninguna duda. Y aún conociendo a gente que sabe lo que es, todavía no he visto que "la utilice".

El amor, para mi, el mejor de los sentimientos, el que te hace sentir que estas vivo. Podría explicarlo desde un punto de vista muy riguroso, la definición que se dice "de libro", pero es mucho más sencillo. Para que exista amor, o aunque sea, el principio de ese sentimiento, debe existir otra persona, que te haya entrado por los ojos pero te haya llegado al fondo del alma. Teniendo eso, viene todo lo demás. Incluso si esa persona no te corresponde ni de lejos, tu estas tan enamorado que estas nervioso si no sabes donde está, por si le pasara algo, tienes mariposas en el estomago cada vez que la ves, aunque sea de lejos o aunque ni siquiera te dirija la palabra. Y qué no decir que seguro que TODOS hemos dejado alguna vez de comer porque estábamos nerviosos acerca de esa persona. Sin ninguna duda, el que siente amor siente empatía, deja atras la indiferencia e implora para que nunca se acerque el odio.

Si alguno lee alguna vez estas líneas torpemente escritas, que recuerde esto: pueden quitarte todo, pero que JAMÁS te quiten las ganas de vivir, las ganas de amar.

sábado, 8 de enero de 2011

Forma de ser

Ayer pude ver como es la sociedad hoy en día o, al menos, como se hacen las cosa. Por lo visto eso de beber y echarle cara es lo que se lleva ahora, como suponía. Pero una cosa es cara y otra cosa es preguntarle a dos niñas "¿ustedes dos por qué estáis tan buenas?". Eso supera el límite de la "caraduréz".

Pero sin embargo, no me molesta que la gente sea así. Al revés, creo que esas personas ahora mismo no se dan cuenta de las cosas tan bonitas que se pueden llegar a vivir. Vale que puede que sean personas que consigan en 10 minutos lo que a mi me cuesta conseguir muchísimo más, pero no me importa. La verdad es que, pese a mis momentos de bajón (que últimamente suelen ser muy a menudo), me encanta ser como soy.

Porque no hay cosa que más me guste que intentar conquistar a una mujer, poco a poco, y que al final pase lo que sea (que normalmente es más bien nada). Porque me gusta eso de saber cómo le ha ido cada día. Porque me gusta saber qué piensa de esas cosas que son importantes para ella. Y hay gente que no es capaz de ver eso, solo ve el ir de flor en flor. Comprendo que sea algo que igual vaya con esta edad que tenemos, cada uno es como es.

Creo que así es como se debe de ser, por lo menos en este aspecto, yendo de frente, y mostrando al mundo como somos realmente. Si somos tímidos, extrovertidos, románticos o super simples, pero así solo es como realmente conseguiremos que se fijen en nosotros, sin ningún otro filtro.

jueves, 6 de enero de 2011

Asco de tópicos

Existen, y son dolorosos. Unos más y otros menos, otros dependerán del momento en el que te encuentres o de quién te lo diga. Mi momento no es para nada bueno, por mucho que intente disfrutar de las pequeñas cosas que tengo, que son las únicas que me quedan. Y algo de lo que impide que pueda estar bien es la tontería de los tópicos.

Que si las mujeres no saben hacer tal, que si los hombres son más inútiles en cual, todo tonterías, habrá personas capacitadas para todo. Pero sin duda, el que más me molesta, porque es el que menos se cumple, es el de "los hombres no sois románticos". Por supuesto, como he dicho antes, habrá gente que lo sea, y habrán otros que no. Pero va a más.

Sin duda, la mayoría de las veces es al revés. Las mujeres son más frías y los hombres con el corazón más tierno, por decirlo así. Lo paso fatal porque, no se por culpa de qué en mi, la gente cree que soy más cerdo que todas las cosas. MENTIRA, amo estar abrazado a la persona que me gusta, sentir hasta cómo respira, y todo lo demás queda aparte. Y por supuesto, las mujeres, últimamente, pasan un poco más de eso. Si alguna lo lee que no se ofenda, pero yo a todas las que conozco las veo que pasan de eso al máximo, y van más al placer.

Y mi pregunta es, ¿hay algo más bonito que SENTIR el amor? ¿hay algo mejor que mirar a los ojos a esa persona especial y ver el mundo en ellos? Porque si hay algo mejor, por favor, hacérmelo saber.

Reflexiones II

Por fin! Por fin pude hablar con ella. Cada momento, incluso por tonta que fuera la conversación, lo disfruté al máximo. Y por lo que he visto, somos muy parecidos. Tenemos muchísimas cosas en común, acabaría antes diciendo aquello en lo que no coincidimos, pero es una pena que todo sean castillos en el aire. Posiblemente quede como una muy buena amistad, por mucho que yo quiera que vaya más allá.

Todos me dicen que poco a poco, que seguro que lo consigo, que esta es mi oportunidad, y la verdad es que todo está más a favor que nunca, y no puedo evitar ilusionarme y pensar como sería todo, y como dejaría de serlo. Me encanta todo lo que imagino, de verdad. Pero es ir demasiado rápido, y seguro que ahora mismo ni quiere verme. Posiblemente, puede que todo se quede en mucho hablar, pero después nada, ni siquiera salir a tomar algo.

Es una pena que tenga tanta poca confianza en mi mismo. Con algo más de confianza y menos vergüenza, aunque no cambiara nada, podría estar más seguro, echarle más cara y decirle todo. Yo creo que es mala suerte. He tenido muy malas experiencias y, a pesar de los momentos buenos que he pasado, a mi se me quedaron grabados a fuego aquellas cosas que te merman, que hacen que te vengas abajo.

No importa cuantas veces me repita que esta vez no me va a pasar, que mi pensamiento no cambia. Solo puedo prometer una cosa: lo intentaré, no importa cuanto tiempo me lleve, porque ahora más que nunca SÍ se lo que quiero. Solo me queda continuidad y, si Dios quiere, mis sueños se cumplirán.

lunes, 3 de enero de 2011

Nunca seré

Ni el mejor amigo de nadie, ni el hijo que toda madre desea, ni lo suficiente bueno para ninguna mujer. Y lo peor no es que yo lo piense, lo peor es que todos me lo dicen, por lo que debo de llevar razón cuando lo pienso. ¿Qué he hecho mal? ¿En qué me he torcido?

He intentado ser amable, ser cariñoso, ser amistoso, y no da resultado ninguno. Pero resulta que voy de caradura, de "echao palante", de malo, y puedo tener a cualquier tía de cualquier edad, y encima comiendo de mi mano. ¿Estamos locos? Pero planteo una pregunta, ¿por qué a las mujeres os gustan los tíos sensibles y románticos, si la mayoría de las que conozco están con hombres que las tratan FATAL?

Es difícil que me engañen, pero no imposible. Siempre, desde que tengo uso de razón, he intentado conquistar a una mujer a base de esos pequeños gestos en los que nadie se fija. Y creerme cuando digo que nadie se fija, solo yo. Pero, ¿por qué cambiar esta manera de ser? ¿Acaso soy desagradable cuando intento conocer a una niña? Voy con pies de plomo, intentando no molestar y ser agradable, pero resulta que si entro diciéndole "tienes unos ojos que te comía tol coño" me la llevo de calle. No es justo, hasta yo lo se. Pero me niego a cambiar, me niego.

"Amigos" me decían que si quería algo que valiera la pena debería dejar de ser como soy. ¿Por qué? Nunca le he pedido yo eso a nadie, todos tenemos nuestras virtudes y nuestros defectos, y yo los acepto todos por mucho que me cueste, porque si quieres a una persona quieres el "pack" completo que viene con ella. Y si alguno lee esto, sabed una cosa: aquel que os pida cambiar no es tu amigo, si no alguien que quiere algo de ti.

domingo, 2 de enero de 2011

No sabemos lo que tenemos

Y es verdad. Nos cuesta ver lo valioso que es lo que tenemos justo enfrente. No le damos a todo la importancia que en realidad tiene, nadie, ni siquiera yo, el que escribe estas lineas. Hace falta que alguien ponga en peligro un aspecto importante de su vida para que valoremos lo que tenemos.

Tenemos suerte de vivir, de tener una buena familia, de poder comer todos los días, de poder estar estudiando. Y el día que, Dios no lo quiera, falte algo de eso, o incluso algo mucho más pequeño, sera cuando realmente sepamos cuanto es lo que teníamos. Y no hablemos en el ámbito humano.

Suerte de tener, todos los días, a una persona a la que le podamos contar todo, desde la "superficialidad" del día a día hasta nuestro secreto más oscuro. Suerte de tener un amigo, una relación. Es ahí donde NUNCA valoramos a la otra persona. Una persona que es capaz de compartir TODO contigo: tu vida, tus amigos, tus pasiones...y nunca se queja de nada. Es más, incluso si no le gusta, pone buena cara, porque te quiere tanto, que  soporta incluso esas cosas que tanto odia. Pero no lo vemos cuando lo hace, lo vemos cuando ya no lo puede volver a hacer, porque no esta contigo.

Dudo que esto lo lea alguien, pero si es así, hacedme un favor: reflexionar acerca de lo que queréis y de lo que necesitáis, tened claro lo que queréis e id a por ello. No caigáis en problemas totalmente evitables. Amad, quered, olvidad...pero hacerlo todo desde la sinceridad.

sábado, 1 de enero de 2011

Año nuevo...

...vida nueva, o eso dicen. No creo que una persona cambie de un día para otro, ni siquiera de un año para otro. Las personas cambian en un intervalo de tiempo mucho más grande, aunque el cambio se vaya apreciando día a día. Por eso yo pienso que eso de hacer propósitos de año nuevo no va conmigo. Lo único que hay que intentar TODOS los años es, simplemente, no caer en esos errores ya cometidos, y vivir la vida siempre sabiendo lo que hacemos, que no es fácil.

Y es que la dificultad no radica en vivir un año nuevo, si no en vivir todos y cada uno de los días que lo componen. Días llenos de altibajos, semanas que se harán eternas, meses en los que pasaremos de la felicidad más absoluta a una gran tristeza. Pero lo que de verdad importa es pasar tiempo con aquellas personas a los que de verdad les importas, porque ellos son los que estarán ahí siempre.